LA COMPLEMENTARIEDAD DE GENEROS

Ni los Medios de desinformacion hegemonicos ni ciertos politicos lograron infectar con agendas globalistas a nuestras Comunidades Originarias, que mantienen su resistencia cultural y sus culturas milenarias como la Complementariedad de Generos, sin violencia intrafamiliar. ¿Por que cambiar por Agendas importadas?

PAIS FEDERAL

Alejandro Crivisqui

1/26/20254 min read

LA BUENA VOLUNTAD Y LA COMPLEMENTARIEDAD DE GENERO

Aprendamos de nuestras culturas anscestrales antes que copiar modelos foraneos e importar agendas globalistas que pretenden borrar nuestras identidades nacionales.

"La buena voluntad wichí: una espiritualidad indígena" es un libro escrito por John Palmer que explora la espiritualidad y la cultura del pueblo wichí en el Gran Chaco Argentino. El texto se centra en la "buena voluntad" como un principio fundamental de la vida wichí, que se manifiesta en la armonía social, la ausencia de violencia y la redistribución equitativa de recursos y poder.

Aspectos centrales de lo espiritual en la cultura wichí incluyen:

  1. Husek: Concepto central que se traduce como "voluntad" o "alma". ​ Es el principio organizador de la vida wichí y se manifiesta en la buena voluntad hacia los demás. ​

  2. Chamanismo: Los chamanes (hiyawú) juegan un rol crucial en la sanación y el bienestar espiritual de la comunidad, alejando enfermedades y manteniendo el equilibrio espiritual. ​

  3. Igualitarismo: La organización política y económica wichí se basa en la igualdad y la redistribución, evitando la acumulación de poder y riqueza. ​

  4. Relaciones de género: Las mujeres ocupan una posición central en la comunidad, y las relaciones de género se basan en la complementariedad y la ausencia de violencia doméstica. ​

  5. Cosmología: La visión del mundo wichí incluye una selva circundada de ríos y montañas, y la destrucción de la selva es vista como el fin de su mundo. ​

El libro también aborda la resistencia cultural de los wichí frente a la globalización y la deforestación, destacando su paciencia y tolerancia como formas de resistencia pacífica. ​

En la espiritualidad wichí, los chamanes, conocidos como hiyawú, desempeñan un papel crucial. ​ Son los sanadores espirituales de la comunidad y se encargan de velar por el bienestar espiritual de sus miembros. ​ Sus funciones incluyen:

  1. Sanación: Los chamanes curan enfermedades, que se entienden como condiciones causadas por la falta de buena voluntad, ya sea en el individuo afectado o en su entorno social. ​

  2. Equilibrio espiritual: Mantienen el equilibrio espiritual dentro de la comunidad, alejando las influencias negativas y asegurando la armonía. ​

  3. Viajes espirituales: Realizan viajes espirituales, a menudo potenciados por el uso de plantas como el cebil, para buscar y recuperar el husek (alma o voluntad) de los individuos que lo han perdido. ​

  4. Defensa espiritual: Protegen a la comunidad de las amenazas espirituales y sociales, actuando como intermediarios entre el mundo espiritual y el mundo físico. ​

En resumen, los chamanes son figuras esenciales en la vida wichí, encargados de mantener la salud espiritual y la cohesión social a través de sus prácticas y conocimientos ancestrales. ​

La buena voluntad wichí se define como un principio fundamental de la vida social y espiritual del pueblo wichí, caracterizado por la ausencia de violencia y la promoción de la armonía social. Algunos aspectos clave de la buena voluntad wichí incluyen:

  1. Armonía social: Las relaciones interpersonales se basan en la buena voluntad para evitar conflictos y mantener la paz dentro de la comunidad. ​

  2. Igualitarismo: La organización política y económica wichí promueve la redistribución de recursos y poder, evitando la acumulación de riquezas o autoridad en manos de unos pocos. ​

  3. Responsabilidad comunitaria: Los líderes comunitarios, como el cabezante (niyát) y el chamán (hiyawú), tienen la responsabilidad de velar por el bienestar de todos los miembros de la comunidad. ​

  4. Relaciones de género: Las mujeres ocupan una posición central en la comunidad, y las relaciones de género se basan en la complementariedad y la ausencia de violencia doméstica. ​

  5. Paciencia y tolerancia: La buena voluntad se manifiesta en la paciencia y la tolerancia, incluso frente a situaciones adversas y amenazas externas. ​

En resumen, la buena voluntad wichí es un requisito esencial para todas las relaciones sociales y se manifiesta en la cooperación, la redistribución equitativa y la resolución pacífica de conflictos. ​

La estructura social wichí se organiza en torno a varios principios y roles clave que aseguran la cohesión y el bienestar de la comunidad. ​ Algunos de los elementos principales de esta organización son:

  1. Parentesco y parentelas: La sociedad wichí se basa en un sistema de parentesco cognático (bilateral), donde las relaciones familiares se trazan tanto por la línea materna como paterna. Esto permite una red amplia y flexible de apoyo y cooperación.

  2. Matrimonio uxorilocal: En el matrimonio, es común que el esposo se traslade a vivir con la familia de la esposa, lo que refuerza la posición central de las mujeres en la comunidad y asegura su seguridad socioestructural. ​

  3. Roles de liderazgo:

    • Cabezante (niyát): Es el líder comunitario responsable del bienestar mundano de los miembros de la comunidad. ​ Su función principal es mantener la paz y la armonía social. ​

    • Chamán (hiyawú): Es el sanador espiritual que vela por el bienestar espiritual de la comunidad, curando enfermedades y protegiendo contra influencias negativas. ​

  4. Igualitarismo: La organización política y económica wichí promueve la redistribución de recursos y poder, evitando la acumulación de riquezas o autoridad en manos de unos pocos. ​ Esto se logra a través de la murmuración y la corrección social, que buscan mantener el equilibrio y la justicia dentro de la comunidad. ​

  5. Complementariedad de género: Las mujeres tienen un papel central en la comunidad debido a la práctica del matrimonio uxorilocal. ​ Los hombres, por su parte, son amansados y su mansedumbre se transmite a sus hijos varones, promoviendo una cultura de no violencia y cooperación. ​

En resumen, la estructura social wichí se caracteriza por su flexibilidad, igualdad y énfasis en la cooperación y la armonía, con roles claramente definidos que aseguran el bienestar tanto material como espiritual de la comunidad. ​

Tenemos mucho que aprender de nuestros pueblos Originarios que son parte junto a nuestra herencia hispanica y de los aportes de las colectividades que inmigraron y se integraron a nuestra Patria, de nuestro ser nacional.